sábado, 29 de octubre de 2011

Mokhtar Dahari, el Maradona malayo

Allahyarham Dato' Mokhtar Dahari, como era su nombre completo, fue el más representativo futbolista en la historia de Malasia, nacido el 13 de noviembre de 1953 en Setapak, estado de Selangor. Incluso, muchos consideran que fue el mejor jugador asiático de la década del ´70, y nadie duda de que se trata del más importante integrante del Selangor FA de su país.

Mokhtar fue el primogénito del matrimonio formado por su madre, Aminah Binti Sharikan y su padre, Abeng Dahari, quien era conductor de camiones de transporte, y no ganaba el suficiente dinero como para asegurarle a su hijo una educación de calidad. Buscando mayores oportunidades, la familia se trasladó a Kampung Pandan cuando el niño tenía 11 años, comenzando a cursar la escuela secundaria en el Instituto Victoria de Kuala Lumpur, donde se acercó al fútbol.

miércoles, 26 de octubre de 2011

Erik Nilsson, premio a la constancia

El sueco Erik Nilsson comenzó su carrera jugando para el conjunto del Limhamns IF, el más importante de la ciudad del mismo nombre, donde había nacido el 6 de agosto de 1916, destacando desde pequeño por su agilidad para recorrer el terreno de juego y fino toque con la pierna zurda, por lo que se le ubicó en la posición de lateral izquierdo, llegando a ser uno de los más grandes defensores de la historia de su país.

En 1934 fue contratado por el Malmö FF, uno de los clubes más importantes de la Liga local, en donde jugó hasta 1953 ininterrumpidamente. En ese lapso, disputó 326 encuentros, anotando apenas dos goles, pero contribuyendo de forma decisiva a la obtención de cinco campeonatos locales, y también cinco Copas de la Liga.

Representando a su nación, Nilsson vistió la camiseta sueca en 57 oportunidades, participando con éxito en una gran cantidad de torneos internacionales. El primero de ellos fue justamente el Mundial de 1938, en el que consiguió junto a sus compañeros un muy meritorio cuarto puesto en Francia.

lunes, 24 de octubre de 2011

N´daye Mulamba, nadie es profeta en su tierra

Probablemente una de las selecciones más insólitas que participaron en los Mundiales fue aquella de Zaire en 1974, traída a colación muchas veces por el curioso hecho de que algunos de sus integrantes ni siquiera conocían completamente las reglas del fútbol. Entre ellos, no obstante, hubo uno que llegó a destacarse, antes de ser abandonado por la comunidad del deporte a la que tanto le había dado.

Pierre N´daye Mulamba, tal su nombre completo, nació el 4 de noviembre de 1948 en la ciudad de Luluabourg, hoy conocida como Kananga, y que por aquel entonces formaba parte de Zaire, siendo un interesante mediocampista ofensivo que fue conocido bajo los sobrenombres de “volvo” y “el asesino”, éste último por su capacidad para llegar al gol. Incluso, debutó en la Primera División de su país con apenas 15 años, en el Renaissance du Kasaï.

sábado, 22 de octubre de 2011

Frank Borghi, el beisbolista que derrotó a los inventores del fútbol

Cuando la selección norteamericana derrotó a su par de Inglaterra en el Mundial de Brasil 1950, el 29 de junio de ese año, veintitantos futbolistas entraron en la historia grande de su país. Uno de ellos era el arquero Frank Borghi, que al comienzo de su carrera se había convertido en beisbolista profesional. No obstante, su leyenda dice mucho más que eso.

Borghi, nacido el 9 de abril de 1925 en una familia de ascendencia italiana, había sentido desde muy chico fascinación por los deportes de conjunto. Por esta razón, sus primeros pasos los dio en distintos equipos de béisbol de St. Louis, utilizando el fútbol, que en aquel entonces era un deporte de invierno, para mantenerse en forma fuera de temporada.

Lo curioso del caso es que estaba convencido de la inutilidad de sus pies para la alta competencia, por lo que en ningún caso los utilizaba en el fútbol, reemplazándolos por los brazos en pelota en movimiento, y pidiendo la ayuda de algún compañero al sacar desde su arco.

Frank, que se definía como un gran patriota, acudió al reclutamiento voluntario que el gobierno norteamericano realizó tras el ataque a Pearl Harbour en 1942, el mismo que significó la entrada en la Segunda Guerra Mundial de su país. Posteriormente, fue trasladado a Europa para combatir en el frente de batalla.

jueves, 20 de octubre de 2011

Matheus Oliveira, el festejo hecho futbolista

Cuando Bebeto marcó aquel recordado gol ante Holanda, en los cuartos de final del Mundial de 1994, su hijo Matheus Oliveira tenía apenas dos días de edad. Como su padre no le había visto nacer, decidió homenajearlo de algún modo con aquella celebración que recorrería el mundo, en la cual balanceaba sus brazos, como si su pequeño estuviera allí, hamacándolo.

Lo siguiente en Estados Unidos es historia conocida, Bebeto saldría campeón del mundo junto con el “scratch” tal vez menos vistoso de la historia, y luego se convertiría en ídolo absoluto en el Deportivo La Coruña. Pero la historia de su hijo recién comenzaba a escribirse de forma paralela en aquel julio del ´94.

martes, 18 de octubre de 2011

Achmad Nawir, los cristales de la historia mundialista indonesia

Junto al capitán húngaro
Cuando Edgar Davids apareció en el la temporada 1999/2000 utilizando sus clásicas gafas deportivas, algo que no había hecho antes en los Mundiales de Estados Unidos ni Francia, se informó desde varios sitios que era la primera vez en la historia que se veía algo así, en una competencia de tal nivel. Sin embargo, esa innovación que tuvo un fuerte impulso tecnológico detrás con firmas como Nike, había sido presentada por primera vez, alejada de todos los flashes, en la Copa del Mundo de 1938 en Francia, por nuestro protagonista: Achmad Nawir.

Lo curioso del caso no es sólo esta cualidad del indonesio, sino que además se trata del hombre que fuera capitán del combinado de su país, cuando participó en el tercer Mundial de la historia, representando en ese momento a las denominadas “Indias Orientales Holandesas” -clasificadas porque Japón estaba en guerra con China-, que en su única participación en el evento, cayó derrotado por 6 a 0 ante el gran equipo que tenía Hungría.

La realidad es que, aunque Nawir, que jugaba como mediocampista en el Soerabaja HBS, y sus compañeros sólo disputaron dos encuentros de primer nivel, ya que también lo hicieron frente a Holanda en un amistoso antes de regresar de Paris, perdiendo por 9 a 2, él quedó en la historia por los clásicos lentes de miopía que llevaba en el terreno de juego. Los mismos con los que el resto del tiempo atendía a sus pacientes, porque era médico recibido.

domingo, 16 de octubre de 2011

Alfredo Tomassini, la tragedia de Alianza Lima y las teorías de su paradero

“¡Yo sé lo que digo, carajo, Tomassini esta vivo!” se puede escuchar aún hoy a algún peruano, al ser consultado por sus hijos o nietos acerca del destino de este futbolista, que según la historia oficial, falleció en la tragedia aérea de Alianza Lima que se produjo en 1987, pero que nunca terminó de confirmarse en cuanto a sus causas, y ni siquiera consecuencias.

Tomassini, el primero a la izquierda, abajo
En cualquier caso, Tomassini fue un futbolista peruano nacido el 29 de junio de 1964, que desde pequeño comenzó su formación profesional en el Alianza Lima, llegando a establecerse en el primer equipo de la institución, en momentos de gloria de la misma, cuando el fútbol de ese país gozaba de una reputación que ha ido perdido con el tiempo, y que ahora sueña con recuperar.

Su caso era totalmente adverso al de la mayoría de sus compañeros, ya que ellos eran en su mayoría proveniente de barrios muy humildes, con problemas de alimentación en su niñez, y de piel morena. Tomassini era totalmente blanco, venía de una familia rica, y había tenido una educación de primer nivel. Para colmo, su estilo fuerte pero tosco, contrastaba con la técnica depurada pero los físicos débiles de sus compañeros.

miércoles, 12 de octubre de 2011

Bert Trautmann, reivindicarse en el campo de juego

Pocas personas tienen la oportunidad de reivindicarse de pequeños errores, y son menos aún las que saben aprovechar esas oportunidades de la vida. En el caso de Trautmann la situación se agudiza, ya que se trató de uno de los pocos integrantes de los ejércitos que lucharon la Segunda Guerra Mundial, que pudo devolverle algo, por más pequeño que sea, a aquellas personas a las que tanto les había quitado con su accionar en la contienda.

Pero la historia de este alemán es larga, y merece ser contada, así que allí vamos. Lo primero es que nació en la ciudad de Bremen, un 22 de octubre de 1923, en medio de una sociedad destrozada por los acuerdos firmados tras el final de la Primera Guerra Mundial, y en cuyo interior comenzaba a surgir la figura emergente de Adolf Hitler. Su padre trabajaba en una fábrica, su madre era ama de casa, y tenía un hermano, Karl-Heinz, quien también era su gran amigo.

Cuando los chicos crecieron, a su padre se le hizo imposible mantener los impuestos de su vivienda, y debieron mudarse a un departamento en un barrio de trabajadores en Gröpelingen, donde vivirían hasta 1941. Allí fue donde Bernhard -su nombre de pila- comenzó a demostrar un gran interés en los deportes, especialmente el fútbol, el balonmano y el atletismo.

martes, 11 de octubre de 2011

Andrés Mazzali, y una rubia debilidad

Andrés Mazzali fue uno de esos hombres que parecen elegidos por la vida para destacarse en todo aquello que se proponen. Un guardameta uruguayo que tuvo la posibilidad de cautivar tanto a los futboleros de su país, como a las críticas, sus propios compañeros y también a las mujeres, aunque no siempre se salió totalmente con la suya.

Lo real es que este futbolista, nacido el 22 de julio de 1902 en Montevideo, había demostrado tener una impresionantes dotes para ser delantero en su juventud en Nacional, pero no pudo llegar a disputar demasiados encuentros profesionales en esa posición, porque se hacía muy difícil conseguir el calzado de su número, por lo tanto atajaba con zapatillas comunes y corrientes, e incluso zapatos, merced de sus grandes cualidades técnicas.

Su debut en Primera División, como una premonición de su futura exitosa carrera, sería ante el acérrimo rival Peñarol, en cancha de los “carboneros”, y con una contundente victoria por 2 a 0 como visitantes, en el antiguo Parque de los Aliados.

sábado, 8 de octubre de 2011

Derek Dooley, ídolo de toda Sheffield

Derek Dooley nació el 13 diciembre de 1929 en Pistmoor, Sheffield, en una época en la que el conjunto local del Wednesday era uno de los animadores del fútbol en su país, motivo por el cual lógicamente la mayoría de los niños se hacían fanáticos del mismo, y este pequeño no sería la excepción.

Criado en una casa de trabajadores, ya que tanto su padre como madre cumplían distintos horarios en una fábrica local mientras él acudía a la escuela Owler Lane, en la que le dejan practicar su deporte favorito dos horas a la semana. Lo interesante del caso, es que con apenas 13 años había llegado al primer equipo de la institución, jugando casi siempre como atacante.

Pero su relación con el fútbol no era casual, ya que su propio padre había sido un excelente jugador, que tuvo que abandonar la práctica profesional al momento de tener que mantener una familia, y por ese motivo se le había negado la chance de seguir a prueba en el Bradford City.

jueves, 6 de octubre de 2011

El gol de Javier Zanetti que salvó una vida

El 30 de junio de 1998 se enfrentaron en el Mundial de Francia Argentina e Inglaterra, para dirimir la clasificación de uno de ellos a los cuartos de final de la competencia. Más allá de este dato meramente estadístico, este encuentro tuvo la particularidad de haber salvado la vida de un ser humano que, por más increíble que parezca, se hallaba a miles de kilómetros de allí.

Lo cierto es que, al mismo tiempo el fiscal polaco Narek Kopaczen, un habitante de la ciudad de Szdlowiec, se disponía a ver un poco de fútbol antes de llevar a pasear a su perro como todas las noches. Incluso, luego de ello, tenía la costumbre de ir a guardar su auto Toyota Corolla de color verde, a una estación de policía cercana.

martes, 4 de octubre de 2011

Claudio Tamburrini, el hombre que escapó del horror

Actualmente
El golpe militar que se produjo en Argentina en 1976, y cuyas fuerzas de facto gobernaron al país hasta 1983, dejó la pérdida de 30.000 desaparecidos, además de otros tantos muertos, que pagaron con su vida la lucha por los ideales que defendían. Además de ellos, otros tantos fueron secuestrados, torturados y atormentados, aunque pudieron salir con vida. De eso se trata de la historia de Claudio Tamburrini.

Tamburrini, era uno de los arqueros del Club Atlético Almagro de su país, y estaba a punto de afianzarse como el titular del equipo, cuando fue raptado el día 23 de noviembre de 1977 por las fuerzas militares que el año anterior se habían hecho con el poder. La razón: fuera de los entrenamientos con el club, el guardameta era estudiante de Filosofía en la Universidad de Buenos Aires, y además había estado afiliado al Partido Comunista, motivo por el cual su pensamiento era “de riesgo”.