Charles Burgess Fry, conocido comúnmente como C. B. Fry, nació el 25 de abril de1872 en la ciudad inglesa de Croydon, siendo educado en la Escuela Repton, donde desarrolló una maravillosa imagen de hombre de deportes desde su niñez. Tal vez por este motivo, al comenzar sus estudios avanzados, se unió a la Universidad Wadham, a la que representó en disciplinas como fútbol, cricket y atletismo.
Fry era evidentemente un hombre nacido para estas prácticas deportivas, e incluso, había logrado igualar el récord de salto en largo con 19 años, cuando logró volar sin tocar el suelo 7 metros y 17 centímetros. Sin embargo, su carrera pareció truncarse cuando en su último año en la Universidad de Oxford comenzó padecer problemas psicológicos, que derivaron en que obtuviera un registro de notas menor al que hubiera aspirado.
Una vez graduado, no obstante, fue trasladado a enseñar sus conocimientos en CharterHouse, aunque no descuidó su relación con el fútbol, jugando durante algunos meses entonces en el club amateur Corinthian. Al mismo tiempo, jugaba al rugby en el Blackheath y luego en los Barbarians, y ya se había vuelto un hombre habitual en las convocatorias de la selección inglesa de Cricket.
Con el correr de los años, de igual modo, el fútbol fue superando en su consideración a los demás deportes, y en 1898 se unió al Southampton, que por entonces disputaba la Liga del Sur, para jugar en una posición que hoy definiríamos como la de líbero. Su único encuentro a nivel selecciones, en este caso, lo jugó el 9 de marzo de 1901, en una victoria de Inglaterra por 3 a 1 sobre Irlanda, en la que también participaron destacados compañeros como George Hedley, Ernest Needham y John Robinson.
Al año siguiente de este compromiso, Fry se convirtió en uno de los elementos más notables de un Southampton que alcanzó la final de la Copa FA ante el Sheffield United, que contaba con la inmensa figura, en todos los sentidos, de su arquero William Foulke. El primer encuentro, que igualó el Southampton enviándolo a Replay una semana más tarde, constituyó una de las finales más polémicas de la historia de la competencia.
Según entendía Foulke, que medía más de dos metros y pesaba cerca de 150 kilos, el gol del Southampton, obra del capitán Harry Wood, no debía haber sido convalidado por off-side. Incluso las crónicas explican que salió desnudo de su vestuario para increpar al árbitro del encuentro. Más allá de eso, el triunfo del Sheffield en el encuentro decisivo, por 2 a 1, calmó las aguas, y el ánimo de Foulke.
Ya en la temporada siguiente, Fry se encontró con muchos problemas para hacerse con un puesto regularmente en el conjunto titular del Southampton, y fue probado en varias ocasiones como delantero centro, pero no sentía la posición, y por eso, al cabo de unos meses, prefirió su salida del club, para marcharse al Portsmouth. Lamentablemente, una lesión en su pierna izquierda lo alejaría del fútbol al poco tiempo, centrándose en su carrera en el cricket.
Curiosamente, en este otro deporte, Fry fue uno de los más grandiosos jugadores que se recuerdan de comienzos del siglo pasado, e incluso en el Reino Unido es mucho más famoso por sus habilidades en el cricket que en el fútbol. Prueba de ello es que hasta su retiro definitivo en 1929, se le consideró entre los mejores del mundo, cuando ya tenía una edad avanzada y además, su hijo Stephen Fry y su nieto Charles Fry, también se destacaron en esta disciplina.
Pero, al mismo tiempo, y demostrando su capacidad de triunfo en otros ámbitos de la vida, comenzó a fanatizar políticamente con William Gladstone, un miembro del partido liberal que había estado muy cerca de entrar a la Cámara de los Comunes, y que luego sería famoso. Posteriormente, se volvió consejero de la delegación india en la Liga de Naciones de Geneva.
Por otro lado, también fue nombrado Director del Barco de Entrenamiento Mercury, que funcionaba como una escuela naval primaria que buscaba preparar chicos para la “Royal Navy”, e incluso, llegó a ostentar el rango de Capitán de la Reserva de esta institución.
Curiosamente, durante el ejercicio de esta profesión, uno de los más ilustres visitantes que tuvo Fry fue Adolf Hitler, en 1934, que concurrió junto a miembros de la Juventud Hitleriana para observar cómo se trabajaba en esta industria en el Reino Unido. De hecho, se dice que Fry adhirió al partido nacionalsocialista hasta poco tiempo antes de que se produjeran las masacres de la Segunda Guerra Mundial.
Fuera de toda esta actividad, este hombre también se tomó el tiempo necesario para escribir decenas de publicaciones y libros, la mayoría de los cuales estaban relacionados con su sentimiento por el cricket y el entendimiento de este deporte. El más destacado de ellos es, igualmente, su autobiografía, denominada “Merece la pena vivir la vida: frases de un hombre inglés”.
Finalmente, Fry fallecería en 1956, luego de tener varios problemas de salud mental, asociados a los de su juventud. Iain Wilton, escritor británico, realizó luego una recopilación de su vida, que se considera la biografía más completa sobre este personaje, y que fue denominada “Rey de los Deportes”.
Fuentes - [Wikipedia - Qué fue de - Spartacus - Repton - Life Style - The Guardian]
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